domingo, 25 de junio de 2006

volverá la lluvia

algún día volverá la lluvia
un cielo inmenso a trozos gris
y negro con su furor
de humedades reventadas

algún día volverá
y la lluvia será
un sol de aromas y de lágrimas
amaneciendo entre cristales

algún día
será la lluvia que inunde
el sueño de ser el alma
pequeña que cubra
la espalda con océanos
anunciados

viernes, 10 de febrero de 2006

94_16

han pasado tantos años
que ya todas las miradas
llevan lentillas de ceniza
que oscurece su brillar
y los hombres y mujeres
ni se miran al cruzarse

han pasado tantos años
que nos duelen los huesos
los recuerdos las mentiras
el deseo los dolores y los muertos

nos duelen tantos años
que cuando pasan ni lo notamos
porque anestesiada la memoria
nos morimos
sin enterderlo

jueves, 9 de febrero de 2006

94_14

pones tu bandera de cara al tiempo y te abandonas en la corriente imparable sin saber nada de los acontecimientos y pasan los momentos y cuando vas a recogerla hasta el mástil está corroído y el mensaje que habías guardado en su escudo ha desaparecido carcomido por la imparable flecha que se ha hundido en tu piel y en tu esperanza pero que ya nada sientes de ella
ha llovido la vida sobre las piedras calientes de todo lo demás y se evapora instantaneamente
sin posibilidad de retorno y sin culpabilidad por dejarlos escapar
atrapado en una lucha imposible en la que se disfruta por los variados vericuetos en los que nos deslizamos para intentar alargarnos retrasarnos detenernos
morir en el intento sin casi darnos cuenta
respiras por fin y es otro tiempo y duermes y ya es mañana y trabajas y ya es sábado vives y ya está el tiempo recordándote que no eres nada sin él
como una maleta perdida en la cinta del aeropuerto
sales por un agujero
alguien te recoje te pasean te llevan te dejan te olvidan de abandonan te zarandean te usan
de cara al tiempo

94_13

adiós mi corazón

gritaba enfebrecido
la muchacha
mientras el viento le lamía los pechos
y el hombre ni siquiera volvía la cabeza
agarrado a su látigo
y a su linterna

adiós mi corazón

cada vez más lejos
más silencioso el paisaje
más austero el horizonte
pues ni la sombra
ni la luz
existían sobre la tierra

adiós mi corazón

y el corazón partió volando
y se estrelló contra la roca
dejando guedejas de su carne
y todo el odio
esparcido por el suelo

miércoles, 8 de febrero de 2006

94_11

salir al aire
perdiéndose en la espuma de las hojas
mi otoño que comienza a florecer
y se encuentra solo
como un eco
como un rumor
como un sonido
solo el aire
festoneado de corchos mudos
enclaustrado entre teclas de pianos rotos

un cerco de silencio
que crece como crece todo
hacia el mar
para esparcirse envuelto entre las redes
entre acontecimientos y piratas
entre noticias y mareas de informativos

para dejarse caer a las orillas del adiós
para llorar los sueños
junto a los juegos que no aprendí a jugar
los instrumentos que no aprendí a tocar

y que ya he dejado de pensar
para volver a la alegría

94_10

asombro de la noche ante la luz
escuálida mirada del hombre reseco
para la pálida belleza
que ronda con sus curvas
los huecos de la ciudad
por más que la muerte se acreciente
la vida se despliega como el ocho
indefinido y atónito te dejas
arrastrar por el embrujo del sueño
no puedes pedir más que alguien te devuelva los ecos de su sombra
y
-solo eso-
mi nombre sin articular palabra

94_9

abrimos los paisajes con la luz de nuestros cuerpos
y
entramos en el aire despejando las sombras

como labios
como barcos
como sueños

y los senos se volvieron montes
y las venas salpicaron ríos
y cataratas los valles de amor

como labios
como barcos
como sueños

volver al mar
volver sin miedo
(como el ciclo del carbono que no tiene término)

94_8

el año que terminó la crisis los del efemei se juntaron en madrid y decidieron ser optimistas: aplazarían el caos = los ricos seguirían siendo ricos (más ricos) y así los pobres podrían vivir tranquilos
el año que terminó la crisis los del efemei se juntaron en madrid

94_7

desde hace cuántos años está la puerta abierta y no entra nadie
cómo se conjugan los verbos si nadie puede hablar
mil cristales se partieron con la explosión y los hombres y las mujeres se deslizaron por las alcantarillas buscando un pedazo de corazón que llevarse al alma
pero solo encontraron plástico
cuando se esfumaron todos los vientos el aire se solidificó y se volvió blanco como la plata de los escaparates
entonces los hombres y las mujeres apagaron sus mentes y encendieron el televisor
pero para entonces se había acabado al energía
seguramente la magia de cada momento no les servía para seguir vivos y optaron por duplicar sus ganancias
y los hombres y las mujeres
invadieron los grandes almacenes
pero no había nada que comprar
y la puerta abierta
y los verbos rotos
y el teléfono comunicando
y tú y yo y todos
en silencio

94_6

nos destruyó un grave misterio de ausencia
un siniestro golpe de silencio
nos deshizó en luz
para ahuyentar de nuestro cuerpo
la triste agonía de las cosas
el desasimiento el olvido
esa capa de polvo mísero
que va decantándose en sal
directa a los ojos
al dolor
al espejo donde partimos hacia el lado opuesto
y con diagonales trazamos
nuestra red de incomprensiones
al entramado donde perecemos
y con ejes tejemos
las rutinas y los desamores
al suelo que fertilizamos
y con arados de sueños perdidos
dejamos sembrar los deseos
...
ese misterio de tu ausencia

lunes, 6 de febrero de 2006

94_5

qué fué de las sutiles páginas de piel que se escondían tras cientos de botones y cremalleras

recuerdo una mañana el frío cristal
de las miradas invernales
cómo el aire se ceñía azul y limpio
a los cuerpos de los adioses
vistiendo el entorno
abrazando el paisaje
queriendo fundirse al calor de esos cuerpos

pero lana algodón tela tejido
botón o cremallera
todos al tiempo
cerraban la frontera de la piel
y el aire mirada de viento
queriendo despojarse
de los cerrojos cosidos
a la piel
al cuerpo
al cálido desgüace de los libros
...
quejido del viento
imposible acallarlo

94_4 (cita)

"cuando sientes que la mano de la muerte se posa sobre el hombro, la vida se ve iluminada de otra manera y descubres en tí mismo cosas maravillosas que apenas sospechabas" Isabel Allende

94_3

se hundió el sol más allá del ácido
que nos dejó vertido en el ojo su temblor
y con un apogeo de alas voló
hacia la exactitud de los números atroces

su destello nos dejó ciegos de dudas
y con el ansia de desvelar los enigmas
se afincó en el alma con tuercas de dioses imperfectos
más libros de hojas arrugadas

un viento oscuro y frío la nada
se apoderó de los difuntos y esparcióse
como un velo en las distancias
dejándonos girando transparentes

adios al sol adios al sol
vuelvo volvemos volveremos sin lecciones
sin misterios al ser eterno
de la pura energía de la nada

adios a los hombres
recuerdos para todos
olvidadme pronto
me muero

94_2

traducir felicidad de espaldas a la pizarra
para que los bebés se meen de risa en sus pañales
cuando noten en tus dedos el asomo de tus dudas
pateando en sus sillitas regurgitando las babas
asombrados porque la idiocia se apodera de tus ojos
"no puedo quejarme"
y aún más solo si cabe devuelves los folios corregidos
porque ellos así lo exigen y sus padres menean el culo
alegres por las espléndidas memeces
que sus hijos han escrito
"no puedo quejarme"
de qué te preguntas atónito ante tanto ente
mocoso que se cree el dios de la creación
porque ya le están saliendo las tetas
que serán el objeto de deseo del compañero
que se la está meneando pensando en ella
"no puedo quejarme"
y los vómitos acuden a mi garganta
al oír los resultados de los análisis
que de la realidad se hacen los técnicos
"esto es lo que han de hacer..."
dejad en paz a los títeres
dejad sus cuerdas colgando
que así no tendrán sentimientos
ni dudas ni pensamientos
"no puedo quejarme"

94_1

saturado de espadas y diablos
hueco de espaldas trabajadas
azul de estómagos vacíos
hirviente de estatuas aceradas
un sol y nada
resumen del espacio desplegado
a la sombra de los años y las dudas
esquema partido en mil pedazos
un asombro ante el espacio
un esqueje que no prende
porque más allá del ser
no encuentra ni miradas
ni rencores si sonrisas
ni deseo
nada
un sueño milenario
destrozado en el futuro
de las cuencas resecas
y sucias del planeta

para ser se hizo aventura hueca
y despacio se abrió en milenios
de guerras y sangres abatidas
y ahora en el siglo del chip
se abraza a si mismo
porque el abrazo del hombre
se ha partido en mafias, miserias y tristeza
comestibles del dinero
para olvidar la utopías

94_0

ayer hice limpieza en uno de esos cajones a los que nunca acudes porque en ellos se guarda lo innecesario o lo inútil y en él me encontré una colección de hojas sueltas de color amarillo con rayitas de esas que sirven para no perder la horizontalidad de la escritura
en ellas había escrito poemas (?) y los voy a transcribir aquí porque el papel se va a reciclar
su contenido quedará prendido en los bits de este espacio que ahora los acoge...
hasta que vuelva a hacer limpieza
como no se me ocurre otra cosa
los numero

espero que os gusten

los dedico a la esperanza
para que siempre ilumine nuestro horizonte
en estos tiempos de crisis permanentemente provocadas

miércoles, 1 de febrero de 2006

reglas de oro para ser feliz

llevaba prendida de mi brazo la queja
cálida mi casa
potente mi coche
repleta mi cuenta
y la queja colgada de mi brazo
sanos mis hijos
saciada mi hambre
limpio mi culo
y la queja de nuevo miró a otro lado
cuando un mendigo
con sus uñas negras
y su olor a miseria
mostró aquel cartel:
"Libera tu corazón de odio.
Libera tu mente de preocupaciones
Vive humildemente.
Da más
Espera menos"
Y la queja seguía dentro de mí como mi único alimento

jueves, 26 de enero de 2006

el gris del miedo

como un enigma entre el gris de las noticias
van salvándose los días como los sueños se hunden
solos y amarrados al flotador inexistente de los labios
entre números y ecuaciones
entre rejas de papel
y misterios de nácar

son como azúcar diluidos
sin pasar factura aún ante el notario del olvido
el único que no cobra por conocer el misterio
como hermosas volutas de alcohol
que arden con la magia del recuerdo

y se envuelven en papeles
de nuevo
grises, misteriosos, dulces
embriagados de sí
para no ser

miércoles, 25 de enero de 2006

el malva de las ojeras

de qué lirio color malva son las ojeras
cuando la melancolía transpira pena
y no deja hueco al aire
que llega desde la calle
llena de risas y de árboles

de qué seda color malva son las ojeras
cuando la rabia tras la muerte
se apodera de laqs células
y no deja lugar
para que la piel se vista de sol
del parque que rodea lacasa
de esa nieve que ilumina

de qué amatista color malva son las ojeras
qué el aroma, la textura y la belleza
penden de la magia de los días
que se pierden por el oeste
dejando la casa vacía.

martes, 17 de enero de 2006

tuning

en este entorno del plagio con tantos cables que se retuercen y anudan
se saludan cada mañana los diosecillos del neón y el ruido de motores
buscando tras la noche de rumor de nieves un momento de azul
en los escaparates de sus motores que brillan sin pudor ante sus reinas

ellas se abren en espumas de nácar y discuten entre sí por saber cuál es la más bella
y se despojan al momento de sus ropas para tenderse entre el cuero y el ámbar
que amasaron con los brazos de aventura que iniciaron a las doce

mientras ellos ya han perdido las llaves del amor
y ahora se entregan al pulido de esos tapacubos
que cubren sus ojos como gafas para mil estrellas
insomnes y aturdidos
no ven la luz que se desprende de los cuerpos de saliva y sacramento de pasión

más de todo

qué buscaba entre las rocas si el océano venía vacío
volcaba sus olas de espuma invisible entre las piedras frías
y las miradas de mil espectadores en la orilla se volvían grises

sacaba paletadas de arena reseca de los hoyos de los niños
y vuelto de espaldas al ruido del paseo miraba el aire
como respirando por los ojos que dejé cansados
para encontrar sonrisas en las preguntas y en las imposibles respuestas

oportunas como el cuco de los relojes sonaban sus horas
y marchaba en sentido opuesto de espaldas al mar
ausente de las rocas, de las piedras, del aire y de todas las arenas
de castillos y de ensueños para sentir de nuevo
más de todo

vagabundo

vagabundo de la nada entre el escombro y la ausencia
me acerco a dormir en los huecos de los nombres
como si la magia de las letras me diera cobijo
cálido acogido entre los trazos de tinta
y aún con el miedo a lo desconocido
pegado a las ropas que no cambio
me ahuyento y vuelvo
desnudo y solo
arrullo
mar

sábado, 14 de enero de 2006

esperanza

me habla desde su sillón de mimbre
sin mirarme apenas y con la piel reseca del dolor
intenta acercarse el calor de los que aún palpitan
mientras los demás la miramos con la pupila dilatada
por la pena eterna y la lástima
ella levanta su hilo de voz para pedir agua
no me atrevo a mirar sus labios
tanto tiempo besados por la sal del mar y mi saliva
me duele apartar sus manos leves de su frente
cuando intenta pedir ayuda
y se agarra de nuevo a sus parches de morfina
porque la dignidad se le escapa con el dolor y la agonía
nadie frente a ella se pregunta
con qué droga aliviaremos nuestro anhelo
esperar esperanza bella vana palabra
para soportar la vida

miércoles, 11 de enero de 2006

citas y libro

El mundo es eso. Un montón de gente, un mar de fueguitos. Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco que llena el aire de chispas. Algunos fuegos bobos, no alumban ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende.
Eduardo Galeano
y un libro
para leer despacio y eliminar las ojeras